Es normal que en algún momento las parejas decidan crear una cuenta corriente mancomunada. La verdad es que, si hay confianza, no debería darse ese debate de ¿juntos o separados?.
Aunque si bien esto puede representar un problema para muchos, está otra opción: La intermedia, es decir, que ambos tengan sus cuentas privadas y una mancomunada para gestionar los gastos en común.
Una cuenta en pareja o mancomunada, en definitiva, es una muy buena opción para la economía del hogar.
Los titulares suelen usarla para pagar recibos en los servicios públicos, compras en el supermercado, gastos en común y hasta como ahorro a la hora de planificar las próximas vacaciones.
Aunque tengas una cuenta mancomunada, a través de tu cuenta individual puedes recibir tus pagos de nómina sin ningún problema. Es importante que en toda pareja se gestione la economía familiar en conjunto, pero sin perder la independencia financiera.
Es importante que para que esta fórmula tenga éxito, se debe dar prioridad a la cuenta en conjunto por encima de la personal.
Antes de abrirla, revisa bien con tu pareja ¿qué uso le quieren dar? ¿Cómo se van a repartir los gastos? ¿Cuál es la cantidad de dinero que ingresará cada uno? Importante, cumplir con lo estipulado.
Abrir una cuenta mancomunada en pareja
En sitio de web del Banco de España y Finanzas Para Todos de la CNMV, especifican que las parejas que decidan abrir una cuenta mancomunada, lleguen a un acuerdo previo en cuanto a la distribución de los ingresos (piso, coche, viajes).
No tienes por qué dejar de lado tu cuenta personal, puedes programar que se realice una transferencia automática a tu cuenta personal de forma mensual.
Las cuentas en parejas tienen sus ventajas, más allá de lo que muchas personas creen; es una buena forma de simplificar las finanzas y dividir los gastos del hogar.
Evita estar con tu pareja haciendo cuentas para destinar qué porcentaje de tu sueldo irá a la economía del hogar. Expertos en finanzas apuntan que, si las parejas viven juntas, el ir y venir de transferencias y billetes, resulta agotador si estos no comparten una cuenta.
Luego de tener la conversación del aporte individual para la cuenta en conjunto, la segunda pregunta que se hacen todos es: ¿Cuánto me va a costar? ¿El banco entrega una tarjeta gratuita a cada titular?.
La clave para decidir cuál es la mejor cuenta conjunta, es primero tener claro para qué se va a usar y después, comparar. Por supuesto, una cuenta conjunta atractiva debe ser por lo mínimo gratuita.
Actualmente, hay diversas ofertas de cuentas corrientes que admiten varios titulares sin gastos adicionales, de hecho, ni siquiera hay un cargo por si los titulares no domicilian su nómina.
Esta es de las mejores opciones para aquellos que desean tener su cuenta conjunta, pero desean conservar activa su cuenta individual, empleando la conjunta solo para gastos del hogar, domiciliar recibos, hacer pagos e ingresar dinero de vez en cuando.
¿Cuáles son las mejores opciones?
Una de las mejores opciones la ofrece el BBVA a través de la cuenta online que no tiene ningún tipo de comisiones y se puede abrir solo en compañía (admite hasta dos titulares) eso sí, los dos deben ser clientes del Banco.
Cada uno de los titulares recibirá su tarjeta de débito completamente gratuita. Sirve para cubrir todos los gastos del día a día, enviar dinero por Bizum, comprar, ahorrar, entre otros.
Otra muy buena alternativa la ofrece la Cuenta Clara de Abanca que, al igual que la anterior, admite hasta dos titulares en la cuenta, pero deben ser nuevos clientes del banco.
Los titulares recibirán su tarjeta de débito completamente gratuita, con la diferencia de que es virtual, así que solo se puede usar con Apple Pay o Google Play. El límite máximo que acepta este tipo de cuenta es de 30.000 euros.
Ni el BBVA ni Abanca piden como requisito domiciliar una nómina, ni recibos y muchos menos una cifra mínima.
Otras entidades bancarias también ofrecen cuentas conjuntas gratuitas, pero ¿cuál es la diferencia? Muchas solo ofrecen la tarjeta únicamente al primer titular, en caso de que el segundo también quiera una, tendrá que pagar una comisión anual.
Entonces puede ser un problema si ambos desean tener una tarjeta; ahora, si el propósito de la cuenta es secundario, entonces con una sola tarjeta basta.
Los beneficios de abrir una cuenta con dos titulares
El objetivo de una cuenta conjunta es que ambos titulares puedan disponer libremente de los ingresos que entran al hogar. Entre los principales beneficios están:
- Muy útil a la hora de pagar facturas comunes: Ayuda a pagar los gastos compartidos de la pareja, por ejemplo, el alquiler, la hipoteca del piso, pago de automóviles, compras en el supermercado, actividades de ocio, materiales del colegio de los críos. Es una opción sencilla y fácil de usar.
- Cada uno de los titulares controla el dinero: Siempre y cuando los dos sean responsables, es una forma igualitaria de tener control sobre las finanzas del hogar. Los dos pueden saber cuáles son los ingresos y en qué se gastan.
- No necesitas permiso de tu pareja para realizar cualquier compra como sucede.
- Se simplifican todos los procesos financieros del hogar.
- Los dos pueden tener acceso a la banca en línea, así cada uno sabe cómo manejar la cuenta.
- No es necesario domiciliar la cuenta ni tener que estar abonando, como en la mayoría de los casos.
Inconvenientes de tener una cuenta compartida
No todo es perfecto, entre los problemas que pueden surgir tenemos:
- Se tienen que pagar ciertos gastos asociados con la tarjeta y mantenimiento de la cuenta. Por eso, la importancia de asegurarse que, a la hora de abrir una cuenta compartida, el coste de ambas tarjetas sea completamente gratuito.
- Los cotitulares son responsables del funcionamiento, tanto para lo bueno, como para lo malo. Es importante que cada gasto grande que realices lo consultes con tu pareja, ya que, en caso de que se realice un pago excesivo, el otro titular también debe realizar un reembolso al banco y gastos adicionales.
